martes, 16 de diciembre de 2008

Max VALIER (1895 - 1930) Austria/Alemania

MAX VALIER – ALCANZAR LAS ESTRELLAS



271106

amigos,

   hace ochenta años, Max Valier andaba jugándose la vida con sus vehículos experimentales a reacción. Más que victorias o records, lo que buscaba era mejorar el rendimiento de los cohetes impulsores destinados a sus soñadas naves interplanetarias.

   Se trataba de una carrera contra-reloj puesto que Max Valier, que anhelaba ser el primer astronauta, tenía ya treinta años.

hastaluego



Max  VALIER   (1895 - 1930)       Austria/Alemania                   actualizado 121208


Richard Egan (Leónidas)
a John Crawford (Agatón):

            Cuando yo era niño,
siempre deseaba
alcanzar las estrellas
con mi espada.

[en "The 300 Spartans",
1962, Rudolph Maté]


   Nacido en Bozen/Bolzano (SüdTirol o Alto Adige) el 9 de Febrero de 1895 y residente en Munich, fue un físico especializado, como VonOpel, Sander o Volkhart, en los automóviles a reacción, propulsados por cohetes. Y al igual que los citados, Valier pilotaba sus propios ingenios en ensayos o exhibiciones. Dichos técnicos seguían los experimentos iniciados en 1918 por Robert Hutchings Goddard (1882-1945), quien ya efectuaba lanzamientos de cohetes propulsados por combustible líquido desde 1926 en Auburn y Worcester, Massachusetts (por no remontarnos a los pirotécnicos chinos del siglo XIV).

   Kurt C. Volkhart había pilotado en pruebas convencionales durante los años veinte; logró varios éxitos en las carreras de Nideggen y sería vencedoren la Subida de WinterBerg 1924 (con Bugatti) o en la EifelRennen de 1930 (en categoría voiturette con Bugatti litro y medio). Pero es más conocido por trabajar para Opel en el Rak.1 (Opel Sander-Rakete). Volkhart había sido el encargado de pilotarlo a puerta cerrada, en el Schönauer Hof, el 11 de Abril de 1928. El piloto-ingeniero consiguió alcanzar la velocidad de 104 Km/h en 8 segundos.

En el diseño del Sander-Rakete intervino también Max VALIER. Aquí lo vemos cuando aún no llevaba pintado el patrocinio de Opel y con Volkhart al volante (de la Enciclopedia Fleurus)



Volkhart con el Opel Rak.1 Sander-Rakete. Obsérvense los muñones de ala laterales para crear un efecto anti-sustentante (archivo A. Mallo)

   Los experimentos se prosiguieron sin pausa; el 17 de Abril se efectuó una segunda prueba y para el 23 de Mayo ya se disponía del Opel Rak.2, que pilotaría el propio Fritz VonOpel, alcanzando los 201 Km/h. (Antiguo piloto de autos y aviones, VonOpel había sido 21º en el GP del ACF 1908.)



Fritz VonOpel con el Opel Rak.2 Sander: 200 Km/h sin despeinarse. El Rak.2 tenía alerones más grandes además de 24 cohetes. Carl Jörns también probó el Rak.2 en el AVUS el 23 de Mayo de 1928 (archivo A. Mallo)

   Los automóviles Rak de VonOpel, además de su revolucionario sistema de propulsión, innovaban en la adición de alerones estabilizadores a alta velocidad, con ángulo de incidencia reglable desde el puesto de mando. El primer vuelo tripulado efectuado con un aparato a reacción lo había llevado a cabo el 11 de Junio de 1928 el aviador Fritz Stamer en Wasserküppe, a los mandos de su planeador Stamer Ente provisto de dos cohetes Sander, con el que efectuó un salto de 1.200 m. Un año más tarde, el 30 de Septiembre de 1929 y en Rebstock, tendría lugar el primer vuelo del avión-cohete Opel-Sander Rak.1, vuelo que duró 3.000 metros con el intrépido Fritz VonOpel a los mandos. Sin embargo, tres meses antes ya había volado el Espenlaub Rak.3, otro avión-cohete fabricado por los hermanos Espenlaub bajo diseño de Max Valier. Valier se accidentó en un vuelo posterior, pero prosiguió experimentando con automóviles-cohete.

   Por entonces, Volkhart se había independizado de Opel para desarrollar sus propias ideas sobre el tema, asociado a Max Valier y al pirotécnico fabricante de cohetes Friedrich-Wilhelm Sander, y el 2 de Diciembre de 1928 ensayó su prototipo en el AVUS; el resultado debió ser tan esperanzador que, para el 1 de Abril de 1929 (lunes de Pascua), organizó una exhibición con público sobre el circuito de NürburgRing, secundado por Sander y Valier. En el programa se incluía una bicicleta a reacción que conduciría el propio Volkhart. También Valier pilotaría alguno de sus impresionantes autos-cohete.

   La afición de Max Valier se fomentó en su infancia, cuando observaba las estrellas y soñaba con que el hombre pudiera alcanzarlas por medio de astronaves propulsadas por cohetes. En 1913 comenzó estudios de física y astronomía en Innsbruck y poco después aprendió a pilotar aviones mientras cumplía el servicio militar. Valier escribió varios libros donde explicaba sus teorías y hacía futurismo, describiendo todo tipo de vehículos impulsados a reacción por cohetes, así como sus estudios para lograr para los mismos un combustible más efectivo que la pólvora (como el oxígeno líquido o el ácido carbónico comprimido).

   La vía era la acertada: el misil V2, utilizado por Alemania en 1944 como arma de represalia (VergeltungsWaffen), alcanzaba más de 5.500 Km/h impulsado por alcohol y oxígeno líquido.

Una de sus obras de ciencia-ficción: "Viajes con Cohetes" (archivo Hp Bröhl, publicada en "Motor Clásico")

   Valier, frustrado por el hecho de que VonOpel le había prometido pilotar el Opel Rak.2 antes de decidir manejarlo él mismo, construyó en poco más de un año varios vehículos que pudo conducir personalmente, como el Valier Rak Bob 1, un trineo a reacción con el que logró 110 Km/h en sólo 130 m (es decir, en 3,6 s). El Rak Bob 2 era mucho más ambicioso porque llevaba 16 cohetes que se podían encender a distancia y, sin piloto esta vez, casi alcanzó los 400 Km/h. El Eisfeld-Valier Rak.2 discurría sobre carriles, mientras que el Valier Rak.6 y y el Valier-Heylandt Rak.7, siempre de retropropulsión, funcionaban con oxígeno líquido y fueron construídos gracias a la ayuda de Paul Heylandt, propietario de una fábrica de licuación de gases.

El Eisfeld-Valier Rak.2 echando humo, como corresponde (archivo Hp Bröhl, publicada en "Motor Clásico")

Max VALIER con el Valier Rak.6 (archivo Hp Bröhl, publicada en "Motor Clásico")

VALIER posa para la posteridad con Heylandt y el Valier-Heylandt Rak.7 (archivo Hp Bröhl, publicada en "Motor Clásico")

   Junto con Willy Ley (1906-1969) y Wernher VonBraun (1912-1977), Valier también contribuyó a la creación de la Sociedad de Viajes Espaciales (Verein für RaumschifFahrt), su auténtica vocación. Pero tanta actividad concluyó súbitamente porque el sábado 17 de Mayo de 1930 la explosión de una bombona de combustible líquido mató en Berlín al osado ingeniero-piloto, que partió hacia sus queridas estrellas.

Miembros de la Verein für RaumschifFahrt con cohetes de todo tipo. VALIER podría ser el primero por la izquierda, mientras que VonBraun es el segundo por la derecha (de la Enciclopedia Fleurus)

Max VALIER y el Rak.7, que echa humo por todas partes, no sólo hacia atrás, en un reportaje que da noticia de su accidente mortal (de "Le Miroir des Sports", archivo Gus)

   En algunas ciudades hay calles que llevan su nombre, lo mismo que un cráter de la Luna (de 67 Km de diámetro). Y en Tirol del Sur se construyó un observatorio astronómico para aficionados llamado "Max Valier". No habían pasado ni cuarenta años desde su desaparición cuando Neil Armstrong dejó la primera huella humana sobre el suelo lunar, al que había llegado con una astronave impulsada por cohetes


El AmateurAstronomen "Max Valier" y su emblema (de Die Sternwarte "Max Valier" in Obergummer in der Gemeinde Karneid, en www.maxvalier.org)

Max VALIER sobre el Valier-Heylandt Rak.7 (de la Enciclopedia Salvat)

Max VALIER (1895-1930)
(de www.tayabeixo.org)


VonFrankenberg: Der NürburgRing, pg. 105
Enciclopedia Salvat del Automóvil: tomo 8, pg 119
Motor Clásico: Mayo de 1995 (Christian Mantz), pg. 28-29
Gus (251103 –"Le Miroir des Sports": 27 de Mayo de 1930)
Enciclopedia Fleurus – Espacio: pg. 87
http://hotrodnostalgia.com/Store/Books/
http://de.wikipedia.org/wiki/Max_Valier
http://www.tayabeixo.org/biografias/feb_1q.htm

No Mirando a Nuestro DaÑo
(Todos los Pilotos Muertos)
 

martes, 9 de diciembre de 2008

Héctor SUPICCI SEDES (1903 - 1948) Uruguay

HÉCTOR SUPICCI SEDES - ALGUNAS LÁGRIMAS



190908

amigos,

   el más popular piloto uruguayo durante décadas comenzó a competir hace unos 80 años, ganó el Gran Premio Argentino de Carretera hace 70 y murió hace 60.

hastaluego



Héctor  SUPICCI  SEDES   (1903 - 1948)    Uruguay     90406 actualizado 91208


Para Pilar C. T.
que gana en mi recuerdo cada día


   "--¡Hermanito! --gritó, corriendo
hacia él.

   Carlos Guerra levantó la cabeza
y representó su parte en la comedia.
Los muchachos se abrazaron como si,
en realidad, se encontraran después
de considerarse perdidos mutuamente.
Tito, que era más sentimental,
hasta logró derramar algunas lágrimas."

J. Ward ("La Brigada Heroica", 1945)


   Figura del automovilismo uruguayo que descolló en las pruebas de Turismo de Carretera de Suramérica desde 1932, muriendo en una de ellas. Había nacido en Montevideo el 15 de Marzo de 1903.

   Aunque aún no se llamaba así, el Gran Premio Argentino de Turismo de Carretera había celebrado su primera edición en 1910 (con victoria de Juan Cassoulet al volante de un DeDion-Bouton 18 HP: 759 Km a 24,43 Km/h de media), pero los campeonatos nacionales no nacen oficialmente hasta 1934 (Emilio Karstulovic Bonaci -por cierto, chileno-, es quien inaugura el palmarés) y su reglamento experimenta diversos cambios a lo largo del tiempo.

   En 1935, un gravísimo accidente sufrido por Ernesto-Hilario Blanco al intentar evitar a un aficionado que cruza la calzada en Rosario causa la muerte de 13 espectadores, y las autoridades toman cartas en el asunto. El ministro de Obras Públicas emite un decreto según el cual "De ahora en adelante sólo se podrán correr pruebas de turismo en carretera a no más de 110 kilómetros por hora."

   La prohibición desaparecería más tarde, pero los peculiares autos utilizados en aquellas pruebas de carretera abierta habían quedado rebautizados como Turismos de Carretera (TC). Hasta entonces se llamaban, simplemente, baquet o bucket  por sus asientos de cubo, y eran generalmente roadsters artesanales con bastidores y motores de serie algo trucados. En 1938 se estipulaba que los autos debían llevar carrocerías metálicas cerradas, lo que provocó el auge de los coupés, como versión más ligera y deportiva de lo que aún se llamaba "conducción interior".

Para evitar consecuencias fatales en vuelcos como el de la foto, tan espectacular, el reglamento impuso que los TC fueran de carrocería cerrada; es decir, con techo metálico. Esta impresionante fotografía de Ebiharo Kikuchi data de 1936 e ilustra un percance sufrido por el baquet Ford nº 14 de Daniel Musso (1909-1990) y su acompañante, que se saldó sin víctimas (archivo "LAutomobile")

   El chasis y el motor debían corresponder a un modelo de serie. Es por este nuevo reglamento por lo que el campeonato nacional de TC se contabiliza por varios autores a partir de aquella temporada 1938; o, según otros, desde la anterior o la siguiente. En 1935, el campeón fue Arturo Kruuse; en 1936, Ernesto-Hilario Blanco; en 1937, Eduardo Pedrazzini; en 1938, Ricardo Risatti; en 1939, Ángel LoValvo; y en 1940, Juan-Manuel Fangio.

   Héctor Supicci, que había comenzado a competir en 1927, ganó las cuatro ediciones del Gran Premio Nacional de Uruguay, la Montevideo/Rivera/Montevideo, que tuvieron lugar entre 1932 y 1938. En 1935 había ganado la Buenos Aires/Mendoza (la etapa más larga en carreras de carretera argentinas hasta la Buenos Aires/Tucumán del Gran Premio del Norte 1940).

Héctor SUPICCI SEDES (archivo G. A. Engels)

    En 1936 brilló en las primeras etapas del Gran Premio Virginio F. Grego y el año siguiente terminó 2º en las I Mil Millas Argentinas (tras Eduardo Pedrazzini, que completó la distancia, a 96,50 Km/h, también con un Ford V8 coupé) y fichó 3º en el Gran Premio Argentino de Carretera 1937. El vencedor fue Ángel LoValvo ("Hipómenes")  con Ford V8 coupé a 80,54 Km/h, pero Héctor ganaría este Gran Premio el año siguiente.

SUPICCI (a la izquierda) discute con el periodista Ricardo Lorenzo Borocotó  el reglamento de las I Mil Millas Argentinas 1937, la primera prueba de carretera (de 1.609 Km) en la que se iban a utilizar exclusivamente autos con techo "(...) de cualquier fuerza o cilindrada, siempre que tengan carrocería de paseo o de turismo (...)"  SUPICCI fue 2º en la prueba, tras Eduardo Pedrazzini, ambos con Ford V8 coupé (archivo A. Parga)

   Con su Ford V8 coupé modelo 1937 muy bien preparado, se presentó Héctor en el Gran Premio del Sur Argentino 1938, a disputar en Marzo. (Los años en los que se celebraban dos Grandes Premios, se diferenciaban por una referencia al punto cardinal. El vencedor del siguiente Gran Premio Argentino 1938, del 18 al 30 de Octubre, sería Ricardo Risatti). En cuanto a la mecánica, las restricciones del reglamento sólo le permitían proteger la respiración del motor con otro filtro de aire, pero el bastidor del Ford de Supicci se hallaba muy reforzado y mejor suspendido con hojas de ballesta suplementarias y 8 amortiguadores Houdaille, en previsión del mal firme de las rutas argentinas de la época.




El Ford V8 flathead apareció en 1932. No era demasiado potente aunque sí muy sólido, y representaba tanto la democratización de los ocho cilindros como una buena base de preparación para obtener potencia barata. De hecho, constituyó la base de los primeros hot rods y animó varios deportivos británicos en los '30. En rojo, un Ford V8 coupé 1934 customizado y remotorizado posteriormente: con una potencia de 330 HP a 5.500 R/mn y un peso de 1.090 Kg, podía alcanzar prestaciones del orden de 0 a 96,5 Km/h en 8,7 s y 205 Km/h de velocidad punta. El Batten Special 1935 de la última foto llevaba un Ford V8 de 3.622 cm3 y unos 100 HP, con lo que pasaba de 190 Km/h(archivos Tad Burness, Richard Nichols, "American Cars" y Quadrant Picture Library en la Enciclopedia del Auto)


De serie, el Ford V8 coupé 1937 (model 78) estaba animado por el V8 de 221 ci (3.622 cm3) y 85 HP y presentaba una característica calandra en diedro pronunciado, complementada por rejillas laterales (de las obras de Tad Burness y Andrew Montgmery)


El copiloto habitual de SUPICCI SEDES era Silvestre Caleche. Ambos posan en dos ocasiones distintas con su Ford V8 coupé 1937, que muestra la singularidad de llevar ampliadas lateralmente las rejillas de la calandra. Por lo visto, uno de los puntos flacos del V8 era su calentamiento excesivo (de www.grumete.com.uy, vía Karino, y archivo Parga)

El Ford V8 1937 coupé nº 5 que SUPICCI utilizó en el Gran Premio Argentino del Sur 1938. Al menos en teoría, su motor era estrictamente de serie a excepción del filtro de aire y mejoras en la lubricación y refrigeración, pero el bastidor tenía refuerzos y la carrocería se encontraba despiadadamente aligerada (dibujo de José Sanabria para la obra de Alfredo Parga "Historia Deportiva del Automovilismo Argentino". Las demás fotos que ilustran esta reseña se han tomado de la misma obra, excepto cuando se indica otra cosa)

   La lubricación se mejoraba con un depósito suplementario de 4 litros situado bajo el salpicadero (que duplicaba la capacidad original de aceite), mientras que en el asiento trasero se alojaba un tanque de 40 litros de agua que el copiloto podía dirigir hacia el radiador accionando una bomba a voluntad. Con estos y otros implementos de seguridad (roll-bar, lavaparabrisas), Supicci se adjudicó el Gran Premio del Sur Argentino, de 6.224 Km de desarrollo.

   La carrera discurrió entre el 10 y el 20 de Marzo de 1938 y el piloto estuvo entre los mejores desde los primeros compases: era 3º scratch en la primera etapa, 2º tras Arturo Kruuse en la segunta etapa y 1º en la cuarta. Siguió aumentando su ventaja hasta bajar el ritmo en la última etapa (en la que fue 9º parcial), conquistando la victoria con una ventaja de casi dos horas sobre el segundo, Carlos Garbarino. En total empleó 68 h 49 mn 37,4 s, al promedio de 90,44 Km/h.


Apóteósica acogida al vencedor del Gran Premio del Sur Argentino 1938 que, sin perder el cigarrillo, conserva una calma y una serenidad admirables

   Héctor Supicci era un gentleman driver educado y culto, con habilidades mecánicas y relacionado con la intelectualidad de su país, como el polígrafo Juan-José Morosoli Porrini (1899-1957), a quien recomendó que viajara más para enriquecer sus escritos con experiencias ajenas. En 1940 disputa Héctor el Gran Premio Internacional del Norte, de 9.445 Km de desarrollo en el recorrido Tucumán (Buenos Aires)/La Paz/Lima y retorno a Tucumán. Supicci se clasificó 5º en la prueba, tras Juan-Manuel Fangio (vencedor a 86,18 Km/h), Daniel Musso, Rosendo Hernández y Vicente Garbarino. Y en 1948, diez años más tarde de su gran éxito en el Gran Premio del Sur Argentino, Héctor Supicci Sedes se presenta en el Gran Premio de América del Sur, que se desdoblaba en dos secciones con clasificaciones independientes. En realidad, se trataba de dos pruebas distintas: la primera se desarrolló del 20 de Octubre al 8 de Noviembre en el recorrido Norte (Buenos Aires/Caracas).

   En esa primera sección, Supicci Sedes se vio obligado a abandonar pronto al sufrir un percance con su Ford V8 coupé 1947 nº 2. La prueba, de 9.575 Km, se la llevó Domingo "Toscanito" Marimón con un Chevrolet coupé, a 80,73 Km/h.

El Ford V8 coupé 1947 de serie había aumentado la cilindrada hasta 3.920 cm3, con lo que la potencia alcanzaba los 100 HP a 3.800 R/mn, con posibilidades de tuneado (de la obra de Tad Burness)

El coupé Ford V8 1947 nº 2 de SUPICCI, bien equipado para la carrera: carrocería muy despojada, iluminación suplementaria... El motor requería gasolina de 100 octanos, lo que quiere decir que llevaba muy alta la compresión

SUPICCI y su copiloto y amigo Silvestre Caleche se accidentaron en la primera parte del Gran Premio de América del Sur 1948: En Maimará y al intentar adelantar al Ford nº 11 de Arnaldo Alvarado/G. Rivadeneira, cegado por la polvareda chocó contra una alcantarilla y rompió el tren delantero. A su manera elegante, SUPICCI protestó sobre el orden de salida de los autos, que obligaba a los más rápidos a adelantar a demasiados de los no tan rápidos

   Supicci repara el coche y se presenta con Calache en la segunda sección del Gran Premio de América del Sur 1948 (la Sur: Lima/Buenos Aires, de 4.833 Km). Disputando el sábado 4 de Diciembre la segunda etapa (Arica/Antofagasta) y cuando marcha situado tras Ó. Gálvez, Gulle, Hernández, Candela y D. Marimón, sufre un percance estúpido en Victoria (Chile): se pasa de largo su puesto de reavituallamiento (otro Ford 1947, tripulado por Carlos Patrón y Bernabé Vicente, atiborrado de gasolina y neumáticos de repuesto) y, al apercibirse del despiste, quiere dar la vuelta. Pero se detiene en plena maniobra, estacionando el Ford en un callejón taleral porque llega otro auto -el Ford nº 66 de Antonio Zarantonello/E. Martins. Sin embargo, Zarantonello se confunde al ver un muro de curiosos ante él, y cree que debe girar a la izquierda, topándose inesperadamente con el estacionado Ford nº 2 y embistiendolo justo en el costado de la puerta derecha, la del conductor.

Croquis explicativo del accidente

La esposa del piloto seguía por radio las incidencias de la carrera. Aquí la vemos en la sala de su hogar, con algunos de los trofeos de Héctor y el aparato de radio

   Supicci muere en el acto, Caleche sale indemne y Zarantonello abandonaría la competición desde entonces. La trágica prueba la ganó Óscar Gálvez a 102,15 Km/h con otro Ford V8 coupé.

Silvestre Caleche, Héctor Morás y Héctor SUPICCI SEDES en algún momento previo a la carrera. Morás se haría periodista y 37 años más tarde publicaría el libro "Apuntes del Camino", donde se describe el accidente en el que murió SUPICCI

   Supicci tenía la clase y la elegancia moral de los grandes campeones. Un sucedido que parece sacado del libro de Edmundo D'Amici lo demuestra. Como muchos otros aficionados, el hijo del dueño de una estación de gasolina de Montevideo había hecho de él un ídolo, viéndole pasar todos los días con el coupé desde su lecho de enfermo.


   Hasta que decidió escribirle. "Pare un día por la estación de servicio de mi papá, aunque sólo sea para dar aire a los neumáticos."  Ese día llegó. "¿Esta carta es de aquí? Bien, díganle al niño que Supicci y Caleche vienen a saludarle."


   Uno de los Ford V8 coupé de Supicci, completamente restaurado, participaría en eventos de históricos, como el Rallye de Monte-Carlo de Clásicos 2001 o el XXV Rally Internacional del Río de la Plata 2003.

Sesenta y cinco años después de su triunfo, el Ford V8 coupé 1937 nº 5 de SUPICCI SEDES participa en rallies de históricos tan gallardo o más que en los viejos tiempos. Quizá no sea el original, puesto que se observa que el coupé de la foto lleva la calandra de serie y no la ampliada por los laterales del capot motor. Podría ser otro coupé de los que SUPICCI utilizaba para asistencia y repuestos. Aquí circula por Córdoba (Argentina) en 2003 (de www.rallyclubrosario.4t.com, vía Karino)

   El circuito de Tacuarembó se llamó Autódromo Héctor Supicci Sedes en su memoria, y en el Campeonato Nacional de Rally uruguayo hay un "super prime Héctor Supicci Sedes".  Además, el 27 de Abril de 2007 la Junta Departamental de Montevideo declaraba "que es voluntad del Cuerpo, se incluya en el nomenclátor capitalino el nombre del automovilista Héctor Supicci Sedes",  tras considerar que fue el piloto más importante en la historia del país "debido no sólo a sus éxitos deportivos sino a su carisma personal."

   Pero lo que constituye el mejor homenaje es la certeza de que, cuando se extendió la noticia de su muerte, alguien lloró por él


Héctor SUPICCI SEDES (1903-1948)
(de www.grumete.com.uy, vía Karino, y archivo Parga)


Corsa: 2 de Marzo de 1993 (Eduardo Gesumaría "Sprinter"), pg. 6
Borocotó: El Maravilloso Mundo del Auto, pg. 78-81
Alfredo Parga: Historia Deportiva del Automovilismo Argentino, tomo II, pg. 457-459 (Héctor Moras: Apuntes del Camino, pg. 16-18/Silvestre Calache)
http://www.ancap.com.uy/public/gonchi.htm
La Voz Del Interior (Sprinter): 1 de Enero de 2001 (http://www.lavozdelinterior.com/2001/0101/nota8051_1.htm)
G. A. Engels (14 y 280702)
Isbel Quiroz
Félix Muelas (190702)
www.juntamvd.gub.uy/es/archivos/decretos/646-rres_9750.htm
http://www.motorsportmemorial.org/focus.php?db=ct&n=3788

No Mirando a Nuestro Daño
(Todos los Pilotos Muertos)