MICHELE ALBORETO – DISPUESTO A MORIR
250409
amigos,
Michele Alboreto fue un piloto profesional durante un cuarto de siglo, a lo largo del cual no perdió afición.
No había anunciado su retirada y parecía capaz de seguir corriendo
eternamente cuando resultó traicionado por un neumático que perdía aire.
Hace ocho años.
hastaluego
Michele ALBORETO (1956 – 2001) Italia 290802 actualizado 170211
"Soy tan incapaz hoy como el otro día
de expresarle lo agradecido que le estoy.
Pero se lo voy a probar.
Si se tratara simplemente de hacer algo por usted,
estaría dispuesto a morir con tal de hacerlo,
–le doy mi palabra–.
Tengo todavía muchas cosas que decir..."
(carta de Rimbaud a Izambard,
2 de Noviembre de 1870)
Sobre las 15:30 h del miércoles 25 de Abril de 2001 tendría lugar en
el nuevo circuito de LausitzRing (cercano a Dresde) uno de esos
accidentes difícilmente explicables salvo por un oscuro fallo mecánico
de cualquier elemento del auto o una súbita indisposición del
conductor. En plena recta, el Audi R8 que Michele Alboreto probaba de
cara a las próximas 24 Horas de Le Mans perdió la línea, se estrelló
contra las defensas a 300 Km/h y volcó. El circuito, estrenado el año
anterior y uno de los más completos y seguros, no podía ponerse en
cuestión, como tampoco el prototipo, que había pasado
satisfactoriamente los crash testobligatorios (aunque su
roll-barquedaría destrozado). Michele, que en la vuelta anterior había
bajado el ritmo, sólo sobrevivió unas horas.
(de 37Viggen, "Fatal & Serious Motorsports Accidents", en www.youtube.com)
Las primeras especulaciones daban opción a varias hipótesis: fallo
aerodinámico, bloqueo de transmisión, desvanecimiento del piloto... Sin
embargo, una exhaustiva investigación posterior pareció determinar que
la causa del siniestro fue un pinchazo con lento desinflado del
neumático trasero izquierdo, que terminó desllantándose en la recta.
ALBORETO, su Audi y el pinchazo mortal
(foto de AP en "El Correo")
Bien conocido de los aficionados, Michele Alboreto había nacido en
Milán el 23 de Diciembre de 1956. Como John Cobb, Wilbur Shaw,
VonTrips, Andretti o Depailler en los autódromos próximos a sus
domicilios, Michele había admirado en Monza a sus ídolos de infancia,
llegando a ser testigo de las muertes de Rindt y Peterson en aquel
circuito. La espectacularidad del ruido, el olor, los fulgurantes
trazos de colores tan vivos y la percepción de un gozo por encima del
sufrimiento y del riesgo le embriagaron, y esa fascinación marcó su
futuro. Con la vocación consolidada, compaginó el automovilismo con los
estudios mientras pudo. Así, alcanzó su sueño al debutar en fórmula I
en 1981 (Tyrrell-Ford, en el Grand Prix de Sanmarino, Imola), lograr su
primera victoria de Grand Prix en Las Vegas 1982 y ser fichado por la
Scuderia Ferrari en 1984 (fue el último piloto elegido personalmente
por il commendatore). Al vencer en Zolder 1984 (primera victoria en Grand Prix de un italiano con Ferrari desde 1966), se granjearía el apoyo incondicional de los tiffosi. Al término de la temporada era 4º en el campeonato.
En
el Grand Prix Caesars Palace de Las Vegas 1982, ALBORETO se situaba 3º
en la parrilla con el Tyrrell 011/6-Ford Cosworth DFV V8 nº 3. Pero
Cheever, 4º con el Talbot Ligier JS19/02-Matra V12 nº 25, quiso
discutirle esa posición de privilegio en la primera curva. Los dos
monoplazas llegaron a tocarse y el de Cheever quedó algo desreglado, lo
que no le impediría clasificarse 3º. Pero mejor lo hizo Michele, que
lograba aquí su primera victoria en fórmula I. Y también firmó la
vuelta más rápida
(de "El Año Automóvil 1982/83" y archivo "Sport-Auto")
Piloto voluntarioso y con gran ambición de victoria (aunque humilde,
reservado y amable fuera del cockpit),Alboreto había debutado en 1976
en fórmula Monza, en la que continuó el año siguiente, destacando en la
fórmula Italia (4º del campeonato en 1978) y en la fórmula III después
(subcampeón italiano 1979 y campeón europeo 1980, ante Boutsen, Fabi,
Baldi, Alliot y Streiff).
Con un fórmula Monza
(de www.michelealboreto.it)
Hizo después fórmula II con Minardi y resistencia en el equipo oficial
Lancia: 8º en Le Mans 1981, con victoria de clase. Ken Tyrrell se fija
en Michele y le hace debutar en la fórmula I ese mismo 1981, como ya
se ha visto. Pero tendría la desgracia (como la mayor parte de ellos)
de tropezar en su camino con esa gran figura que marca todo un período:
en su caso fue primero Lauda, Prost luego.
Junto
con Teo Fabi y Riccardo Patrese, Michele ALBORETO ganó los 1.000 Km de
NürburgRing 1982 con esta barqueta Lancia Martini 1,4 l turbo grupo 6.
Era la segunda victoria consecutiva de Patrese/ALBORETO, aunque no fue
sencilla. En los ensayos, Patrese se accidentó muy violentamente en
PflantzGarten, quedando conmocionado y siendo atendido en primera
instancia por Michele, que le seguía. Desconcentrado por este episodio,
ALBORETO se salía a su vez poco después, destruyendo el segundo Lancia
Martini. Tras de un completo chequeo médico, Patrese fue declarado
apto para la carrera mientras los mecánicos reconstruían uno de los dos
prototipos con el éxito que vemos. Aunque como entonces el campeonato
de resistencia FIA se jugaba en grupo C, los puntos se los llevaron
Pescarolo/Stommelen con un Rondeau M382-Ford Cosworth al entrar 2os
(de "Sport-Auto")
Michele
toma cruzado la delicada curva Massanet en el Grand Prix de Monaco
1982 con el Tyrrell 011/4-Cosworth nº 3. Malabarismos de esta clase
hicieron que Enzo Ferrari se fijara en él. Y no sólo Enzo
(de “El Año Automóvil 1982/83”)
Aunque
su carácter era reservado, poco comunicativo, Michele ALBORETO podía
mostrarse jovial, optimista y esperanzado. Cuando se mató Villeneuve,
Enzo Ferrari se empeñó en contratarle desde Mayo de 1983, pero Ken
Tyrrell no le liberó del compromiso que tenía con él, y Michele tuvo
que esperar hasta la nueva temporada. Y a la tercera tacada, en Abril
de 1984, ya había otorgado a la Scuderia una victoria en Zolder, la
primera victoria italiana de Ferrari desde la de Scarfiotti
en Monza 1966. Su contrato con Ferrari era exclusivo, teniendo que
prescindir de las carreras de resistencia para el equipo de Lancia
Martini Racing. Por entonces, su compañero en la Scuderia era René
Arnoux, con quien tenía formulado un pacto tácito de no agresión. ("Si
René, por ejemplo, se encontrara delante de mí hacia el final de un
Grand Prix y estuviésemos en disposición de obtener un doblete, el
tendrá la doble certidumbre de poder vencer y de saber que yo no le
atacaré.") Después de múltiples ensayos en Fiorano, Michele se
encontraba a gusto en el Ferrari 126 C4 V6 turbo, que llevaba el dorsal
nº 27 del recordado Villeneuve. A Renaud de Laborderie le confesaba que
de joven admiraba a Ronnie Peterson, a Jackie Stewart; y entre sus
rivales del momento, a Lauda, Rosberg, Piquet o Lafitte: "Son a la vez muy rápidos y muy correctos." Y también que el dorsal nº 27 no le condicionaba: "Del
número 27 prefiero recordar que fue el de Alan Jones cuando su primer
campeonato del mundo más que el de Gilles Villeneuve. Por otra parte,
un número no hace nunca a un piloto." ALBORETO le agradecía a Enzo
Ferrari la confianza que había depositado en él y pensaba que podía
pagársela con una corona mundial
(fotos y declaraciones de ALBORETO a Renaud de Laborderie en "Sport-Auto" y de forum.sports.sina.com.cn, vía Karino)
continua
No hay comentarios:
Publicar un comentario